Es un momento histórico para Novartis. Tras la escisión de Sandoz en octubre y culminando una transformación de varios años, hemos iniciado una nueva era como compañía de medicamentos innovadores. En esta nueva etapa, nuestro compromiso con nuestro propósito de reimaginar la medicina para mejorar y prolongar la vida de las personas sigue siendo inquebrantable.
Centramos nuestra energía en áreas de enfermedades donde existe una gran necesidad de nuevos tratamientos y donde contamos con una gran experiencia y enormes capacidades. También estamos aprovechando nuestras fortalezas en nuevas plataformas tecnológicas avanzadas (terapias con radioligandos, terapias de ARN y terapias génica y celular) que nos ayudarán a ofrecer la próxima generación de medicamentos a los pacientes.
La ciencia siempre formará parte de nuestra esencia. Continuaremos desentrañando los misterios de la biología y desarrollando nuevas tecnologías para combatir las enfermedades. Al embarcarnos en esta nueva etapa, somos conscientes de que queda mucho por hacer para ayudar a las personas a abordar la experiencia de convivir con la enfermedad y ayudarlas a lograr una mejor calidad de vida. Esto también implica trabajar en soluciones que ayuden a afrontar las necesidades cambiantes de los profesionales sanitarios y los sistemas de salud a medida que abordan la introducción de tecnologías innovadoras, el aumento de la carga de morbilidad y las presiones económicas.
De cara al futuro, aspiramos a aprovechar nuestra herencia científica y ampliar nuestro impacto en la salud humana a través de una comprensión más profunda de las necesidades de los pacientes y el fortalecimiento de colaboraciones con stakeholders clave que comparten nuestra misión. Sabemos que nuestro impacto colectivo será superior a cualquier reto que logremos en solitario. La única manera de reimaginar la medicina es hacerlo juntos.
Nuestra imagen renovada representa lo que Novartis encarna en esta nueva era: combinar la ciencia con la empatía y la colaboración para crear medicamentos que devuelvan una sensación de optimismo a las personas que conviven con una enfermedad.