El cáncer de mama es una alteración en las células mamarias que provoca que crezcan de manera descontrolada, afectando al tejido de la glándula mamaria y desencadenando lo que conocemos por cáncer de mama. Se trata del cáncer más frecuente, especialmente en las mujeres, (se da en un 99% de los casos en mujeres), a pesar de que también se puede desarrollar en hombres.
Antes de conocer los síntomas asociados al cáncer de mama, es importante que sepas que en caso de que este sea precoz, no avisa, no causa síntomas, por lo que es necesario hacer revisiones regulares de las mamas para detectarlo cuanto antes.
En caso de que el cáncer aparezca poco a poco y el tumor vaya creciendo, te explicamos algunos de los síntomas habituales que puedes experimentar; aunque ten en cuenta que no son específicos del cáncer de mama, coinciden con otras enfermedades, por tanto, deberás siempre consultar a tu médico para que te confirme un diagnóstico definitivo:
- Presencia de un bulto en la mama o en la axila, que normalmente, no duele.
- Cambio repentino del tamaño, el tacto de las mamas e incluso del aspecto del pezón.
- Irregularidades en la forma del contorno de las mamas.
- Pérdida de líquido a través del pezón.
- Pérdida leve de movilidad en las mamas al levantar los brazos.
- Inflamación en forma de enrojecimiento, calor, dolor o hinchazón en las mamas
Cuando el cáncer ya está avanzado, los síntomas aumentan y pueden detectarse en otras partes del cuerpo. Puede presentarse en forma de cansancio constante, dolor en los huesos, pérdida de peso o síntomas en la piel. Por esto es tan importante el diagnóstico precoz, que pasa por realizar visitas regulares a tu médico para que te haga una revisión mamaria, así como acudir al especialista si notas algunos de estos síntomas.
Aun así, recuerda que también existen tumores benignos, y estos síntomas también pueden estar asociados a enfermedades benignas. En este caso, la visita a tu médico o ginecólogo también te sacará de dudas.