La alimentación es uno de los pilares que, junto con tu equipo médico, deberás cuidar especialmente si tienes cáncer de mama o has superado la enfermedad. Bien si te encuentras en un período de tratamiento o de descanso, o si ya ha remitido el cáncer, será necesario que vigiles tu dieta para mantener un peso saludable y que tu cuerpo disponga de los nutrientes que necesita, así como, para garantizar que la alimentación no interfiera en tu tratamiento de la patología.
Así pues, seguir unas pautas alimenticias adecuadas en cada fase de la enfermedad, que contribuyan a mantener una nutrición adecuada, es crucial en la mejora de la calidad de vida con esta patología1.
Debido a esta circunstancia, muchas personas con cáncer de mama se plantean si para mantener una alimentación adecuada es preciso tomar suplementos alimenticios.
Actualmente, no se dispone de estudios concluyentes que avalen que los suplementos alimenticios tengan un papel determinante en el curso del cáncer de mama3. En cualquier caso, debe ser tu oncólogo quien tome esta decisión, bien porque observe que presentas algún déficit de vitaminas, minerales, etc.; o bien por algún otro motivo relacionado con tus circunstancias personales. Es esencial que sea siempre el profesional médico el que prescriba cualquier cambio en tu dieta, sobe todo, durante el tratamiento, ya que podría interferir en el tratamiento2.
Asimismo, existen estudios que han relacionado determinados tipos de dietas, como la mediterránea, o grupos de alimentos con la prevención del cáncer en general o determinados tipos de cáncer. Sin embargo, no existe ninguna evidencia sobre si los suplementos alimenticios o alimentos concretos ayudan a prevenir el cáncer de mama3.
Para más información sobre pautas alimenticias en personas con cáncer de mama, puedes descargar la ‘Guía de ejercicio físico y nutrición para pacientes con cáncer de mama localizado y avanzado‘.