El cáncer de mama es el tumor maligno más frecuente en mujeres de todo el mundo. En España, se detectan 27.000 nuevos casos cada año y se estima que el riesgo de padecer cáncer de mama a lo largo de la vida es de, aproximadamente, 1 de cada 8 mujeres1.
¿Qué se puede hacer para prevenir el cáncer de mama?
Se estima que se puede reducir el riesgo de padecerlo practicando deporte de manera regular, evitando el sobrepeso tras la llegada de la menopausia y evitar el consumo excesivo de alcohol. Además, está comprobado que el uso de ciertos tratamientos hormonales de sustitución durante la menopausia, incrementa el riesgo de padecerlo.
Visitar a tu médico especialista de forma regular, al menos una vez al año, para que realice todos los exámenes necesarios para comprobar tu estado de salud es lo más importante.
En el caso de que exista un historial familiar de cáncer de mama relevante, es importante que la paciente informe a su médico, para que determine si hay alguna mutación genética común mediante un “consejo genético”. Lo principal en todos los casos, es ser constante en los controles médicos, ya que un diagnóstico temprano en este tipo de cáncer, deriva en una tasa de probabilidad de curación de casi el 100%2.
Pero, ¿qué es el consejo genético?
El consejo genético es el estudio y seguimiento del origen genético del tumor. Lo primero que se realizará es recabar datos de la historia familiar de la persona que tiene el tumor para conocer el número de familiares afectados, anotando la edad en que fueron evaluados y la afinidad de la consanguinidad con la persona actual.